El artículo destaca la importancia de preocuparse más del lado de la demanda ante escenarios de escasez energética, contexto en el cual adquiere relevancia el tema del etiquetado de eficiencia energética (EEE). Se analizan las justificaciones de interés público que ameritarían la intervención del Estado, destacándose la falla de mercado consistente en que éste no es capaz de proporcionar a los consumidores información suficiente y fácilmente comprensible respecto de un atributo (escondido) referido a la calidad del producto, como lo es su rendimiento energético. Junto a la interrogante anterior relativa a por qué regular (y como parte de un marco analítico general susceptible de replicarse en el análisis de otros programas) se abordan otras preguntas entre las que destaca aquella crucial referida a cómo regular (a cómo formular e implementar un sistema de etiquetado de EEE). Al respecto, el estudio intenta una respuesta a interrogantes o disyuntivas tales como si regular requiriendo etiquetas o también estándares; qué productos regular; cómo se debe diseñar la etiqueta; cómo verificar que la información que se proporciona es la correcta (en donde se reflexiona sobre los sistemas de certificación y acreditación); quiénes ganan y pierden con la regulación; cuáles son las estrategias disponibles en términos de la implementación, cumplimiento y fiscalización, entre las cuales se discute si debe tratarse de un programa voluntario u obligatorio.