La violencia contra la mujer constituye un factor de estrés grave que afecta la salud mental de la víctima. En este estudio se investigó el proceso de afrontamiento así como el tema de la multigeneracionalidad, a partir de dos casos de mujeres víctimas de violencia doméstica. Los dos casos se configuran como de extrema violencia, tanto en las familias de origen cuanto en las familias actuales, caracterizando la multigeracionalidad. Para afrontar la situación de violencia, las entrevistadas utilizaron estrategias de afrontamiento focalizado tanto en el problema como en la emoción, y demostraron tener recursos personales, además de recursos socio-ecológicos, como la comisaría especializada y el apoyo de la red social en el rescate de la autoconfianza, lo que confirma la importancia de ese tipo de recursos en el afrontamiento de la violencia conyugal.Violence against women constitutes a severe stressor that affects the mental health of the victim. This study investigated the coping process and the multigenerational phenomenon from two cases of women victims of domestic violence. Both are configured as extreme violence, both in families of origin and current families, featuring a multigenerational. To deal with the violence, the women interviewed have undertaken coping strategies, problem-focused as much as emotion-focused, and relied on personal resources and socio-ecological, as women's police station and social support network in the rescue of confidence, confirming the importance of this strategies in fighting domestic violence.