There is a need for a better understanding on how biodiversity and ecosystem services are spatially related and assess to what extent the conservation of biodiversity will ensure the provision of services. In the Río Cruces watershed (Chile) the spatial congruence between biodiversity and water supply, erosion control and soil accumulation services was assessed using spatially explicit models, geographically weighted regression and overlap analyses. Biodiversity registered a positive spatial relationship with the three ecosystem services. The local R2 value explained up to 95 %, 68 % and 37 % of the variance for soil accumulation, water supply and erosion control, respectively. High spatial congruence (> 67 %) was registered between biodiversity and ecosystem services hotspots. Our study recommends that decision makers develop plans and share efforts for conservation of biodiversity and ecosystem services in 43 subwatersheds, which are 16.4 % of the subwatersheds studied. We suggest that these efforts must be an integral part of environmental policies that need to be generated by the Chilean government.Existe la necesidad de generar una mejor comprensión sobre cómo la biodiversidad y los servicios ecosistémicos se relacionan espacialmente y evaluar en qué medida la conservación de la biodiversidad asegura la provisión de servicios ecosistémicos. En la cuenca del río Cruces, en el sur de Chile, la congruencia espacial entre biodiversidad y los servicios ecosistémicos provisión de agua, control de erosión y acumulación de suelo fue evaluada usando modelos espacialmente explícitos, regresiones geográficamente ponderadas y análisis de superposiciones. La biodiversidad registró una positiva relación especial con los tres servicios ecosistémicos. El valor de R2 local explicó hasta un 95 %, 68 % y 37 % de la varianza para los servicios acumulación de suelo, provisión de agua y control de erosión, respectivamente. Alta congruencia especial (> 67 %) se registró entre biodiversidad y los hotspots de los tres servicios ecosistémicos. Este estudio recomienda a los tomadores de decisiones desarrollar planes y esfuerzos compartidos de conservación para la biodiversidad y los servicios ecosistémicos en 43 subcuencas, las cuales comprenden el 16,4 % de las subcuencas estudiadas. Además, es necesario que los esfuerzos compartidos de conservación sean parte integral de políticas ambientales, las cuales deben ser generadas por el gobierno de Chile.