Preventing young blueberry (Vaccinium corymbosum L.) plants from fruiting can increase their vegetative growth. In previous studies, gibberellin (GA) applications reduced flowering in highbush blueberry, but the response was variable and cultivar dependent and was studied mostly using potted nursery plants. The purpose of this work was to determine whether floral induction can be inhibited by GA in plants established in the field, particularly on newer cultivars now being widely planted. Foliar sprays were applied in several experiments with different application intervals and concentrations; the efficacy was determined by counting the number of initiated floral meristems. GA applications in July and August were more inhibitive than those in September and October, while cultivars did not vary in their response. GA significantly reduced flower bud numbers in three separate studies, but the greatest reduction (49%) required repeated applications from July to October. The results indicate that GA may have limited commercial utility for preventing fruiting in highbush blueberries under field conditions. However, further studies are needed to determine how vegetative growth is affected by the partial inhibition of flowering.La inhibición de la fructificación en plantas jóvenes de arándanos (Vaccinium corymbosum L.) puede mejorar el crecimiento vegetativo. En estudios previos, en su mayoría en plantas de vivero en macetas, de mostró que la aplicación de giberelinas (GA) redujo la floración en arándanos de arbusto alto, pero la respuesta fue variable y dependiente del cultivar. El objetivo de este trabajo fue determinar si la inducción floral puede ser inhibida por GA en plantas jóvenes en campo, especialmente en nuevos cultivares que están siendo ampliamente plantados. En diversos experimentos se hicieron aplicaciones foliares con distintos intervalos y concentraciones; la eficacia se midió contando el número de meristemas diferenciados. Aplicaciones de GA en julio y agosto inhibieron más que aquellas de septiembre y octubre, mientras que el cultivar no fue dependiente. GA disminuyó significativamente el número de yemas florales en los tres estudios, pero el mayor efecto (49%) requirió de aplicaciones consecutivas desde julio a octubre. Los resultados indican que GA puede tener una limitada utilidad comercial para prevenir la fructificación en arándanos de arbusto alto en condiciones de campo. Sin embargo, se requiere de mayor investigación para determinar como el crecimiento vegetativo es afectado por una inhibición parcial de la floración.