El artículo analiza la responsabilidad social corporativa como estrategia para que la gestión pública pueda hacer frente más eficientemente a los nuevos desafíos que la globalización y la modernización del estado plantean a los servicios públicos en los distintos territorios en los cuales se gestionan programas y políticas públicas a nivel mundial. Se identifican elementos que permitan a las instituciones de la administración del estado establecer procesos de interacción más eficientes con el entorno y los distintos stakeholders con los cuales una organización estatal debe relacionarse habitualmente. Frente a este escenario, la responsabilidad social corporativa proporciona una interesante oportunidad para que las instituciones del estado puedan gestionar óptima y éticamente sus relaciones tanto con el entorno interno como con el externo, otorgando una mayor importancia a los impactos que tienen las decisiones y acciones que implementan sobre los ciudadanos, por medio de una relación más transparente y consciente de los intereses de la sociedad civil en general en el desarrollo de su misión.