In Argentine Lola Arias’s Doble de riesgo [Stunt Double]; (2016), tangible and intangible objects are manipulated within interactive spaces to change the notion of archives and to create innovative, lasting records in the interstices between affect and technology. This article examines these new ways to document and proposes that, through them, Arias invents sensichives: archives that embed emotions into the history that produced them. Co-constructed by the artist, actors, historians, and spectators, sensichives are fluid and transferable within and among communities. In this way, sensichives have the power to transform communities and offer them unique tools to confront and dismantle violence.En los espacios interactivos de Doble de riesgo se manipula lo tangible y lo no-tangible para transformar la noción de archivo y construir récords innovadores y perdurables en los intersticios del afecto y la tecnología. Este artículo examina los registros presentados y postula que, con ellos, Arias inventa un nuevo tipo de documentación que incrusta las emociones en los eventos que las habían producido. Co-construidos por los actores y los espectadores, los sensichivos de la instalación son fluidos y transferibles. Son capaces de modificar las definiciones de comunidad y ofrecen a los espectadores herramientas para enfrentar y desmantelar la violencia.