La expansión vertiginosa del coronavirus a partir de marzo de 2020, conllevó en Argentina el confinamiento de la población como medida sanitaria para contener la pandemia. Las medidas de aislamiento social impusieron restricciones a la circulación y a la asistencia a los lugares de trabajo. Este nuevo escenario de pandemia se desplegó sobre un mercado de trabajo que acumulaba fragilidades y tensiones de largo plazo y esas tensiones se habían profundizado en los últimos años. Este artículo se centra en describir y analizar el programa Ingreso Familiar de Emergencia y las características de sus beneficiarios. Dicha transferencia de renta fue direccionada a los sectores más vulnerables –fundamentalmente trabajadores informales- y constituye el programa más importante del período en cuanto al alcance poblacional.The dramatic spread of coronavirus since March 2020 has led to the confinement of Argentine population as a health measure in order to contain the pandemic. Social isolation measures have restricted people’s movement and attendance at their workplaces. This new pandemic scenario was developed when the labor market had been accumulating long-term fragilities and tensions, and these tensions had been increasing in the last few years. This article is centered in the description and analysis of the Emergency Family Income program and the characteristics of its beneficiaries. This income transfer program was directed towards the most vulnerable sectors –mainly informal workers- and constitutes the most important program of the period as regards the amount of population reached.