El presente artículo tiene como finalidad reflexionar acerca de la necesidad de los pueblos de América Latina de promover el desarrollo político, económico y social para el mejoramiento de la calidad de vida de sus habitantes. En este sentido, presenta el panorama de la situación actual de la región, desde el pensamiento Cepalino, destacando la Doctrina Social de la Iglesia Católica como alternativa para mitigar estas realidades. Los autores insisten en la necesidad de implementar acciones desde la política y la religión que favorezcan el desarrollo humano integral. Concluyen que América Latina será distinta cuando los gobiernos y los ciudadanos en general vuelvan la mirada sobre la dignidad de la persona humana y busquen para sí el bien común.