The 1980s began with a vivid awareness of interdependence and a sense of urgency that emanates from the unusual magnitude of the problems all countries are facing. None of these problems can be dealt with or negotiated in isolation. It is necessary to approach solutions simultaneously to consider the interests of all, and in this negotiation the global strategy and the regional strategies prepared by the regional economic commissions will serve as a guideline for the search for consensus, in an effort that will undoubtedly be the most important international act of the contemporary world. There is no other way to cope with those problems effectively. The evolution of the United Nations towards a global leadership and control role is a need that cannot be ignored in multiple spheres of international activity.La década de los 80 comenzó con la conciencia viva de la interdependencia y el sentido de urgencia que emana de la magnitud insólita de los problemas que enfrentan todos los países. Ninguno de estos problemas puede ser tratado y negociado aisladamente. Es necesario acercarse a las soluciones simultáneamente para considerar los intereses de todos y en esa negociación, la estrategia global y las estrategias regionales preparadas por las comisiones económicas regionales servirán como una pauta para la búsqueda del consenso, en un esfuerzo que será sin duda el acto internacional de mayor trascendencia del mundo contemporáneo. No hay otra manera de abarcar esos problemas efectivamente. La evolución de las Naciones Unidas hacia una función de conducción y control global es una necesidad que no puede dejar de percibirse en múltiples esferas de la actividad internacional.