The principle of subsidiarity
El principio de subsidiariedad
Author
Quintana Benavides, Augusto
Full text
https://revistaderechopublico.uchile.cl/index.php/RDPU/article/view/3168210.5354/rdpu.v0i0.31682
Abstract
I deeply appreciate the initiative of the Department of Public Law of the Faculty of Law of the University of Chile to organize a collective reflection on the reforms that it would be necessary to introduce to the Fundamental Charter and, eventually, the physiognomy that a New Constitution could have. When the professors of the Department were asked the possibility of choosing a topic, it immediately occurred to me to address the Principle of Subsidiarity. The reason for this choice is that, if we stick to the passions, there are two antagonistic visions that intersect and cancel each other out: those that staunchly defend the principle of subsidiarity, biasedly emphasizing the existence of abundant abstention duties for the State, versus those who are in favor of purging or suppressing all vestiges of said principle in our Fundamental Charter. That is why it seemed pertinent to me to address this issue, to see if it is possible to find some points of convergence. Personally, I believe that the latter is always possible between rational and reasonable people. Agradezco profundamente la iniciativa del Departamento de Derecho Público de la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile de organizar una reflexión colectiva en torno a las reformas que sería necesario introducir a la Carta Fundamental y, eventualmente, la fisonomía que podría tener una Nueva Constitución. Cuando se nos planteó a los profesores del Departamento la posibilidad de elegir algún tema, de inmediato se me ocurrió abordar el Principio de Subsidiariedad. La razón de esta elección estriba en que, si nos atenemos a las pasiones, hay dos visiones antagónicas que se entrecruzan y anulan mutuamente: aquellos que defienden acérrimamente el principio de subsidiariedad, enfatizando sesgadamente la existencia de copiosos deberes de abstención para el Estado, versus aquellos que son partidarios de purgar o suprimir todo vestigio de dicho principio en nuestra Carta Fundamental. Por eso me pareció pertinente abordar este tema, para ver si acaso es posible encontrar algunos puntos de convergencia. En lo personal, estimo que esto último siempre es posible entre personas racionales y razonables.