The arrival of the MAS-IPSP to the presidency in 2006 marked a breaking point regarding the participation and presence of Bolivia in multilateral spheres, in this sense, the principle of autonomy of the new foreign policy marked a break with the US government on strategies to address the fight against drugs and the eradication of the coca leaf.  In this regard, the government of Evo Morales implemented a paradigm shift in the fight against drugs with the implementation of new strategies to combat drug trafficking and the diplomatic consolidation of the coca leaf to begin the defense of traditional chewing, the consumption and use of the coca leaf for cultural, commercial and medicinal purposes. Today, more than ten years after Bolivia's re-accession to The Single Convention on Narcotic Drugs, Bolivian diplomacy began the process of reviewing the classification of the coca leaf as a narcotic drug in list 1 of the 1961 Convention, the same as It must be accompanied by a more aggressive strategy in the media, academic spaces, multilateral forums and with the consolidation of new alliances with other countries and international organizations.El arribo del MAS-IPSP a la presidencia en el año 2006 y en consecuencia, la implementación de una nueva política exterior marcó un punto de ruptura en torno a la participación y presencia de Bolivia en los ámbitos multilaterales, en especial en temas relacionados a la defensa de los derechos y conocimientos de los pueblos y naciones indígenas. En ese marco, la “Diplomacia de la Hoja de la Coca” se convirtió en uno de los pilares de la política exterior boliviana durante las primeras dos gestiones del ex presidente Evo Morales Ayma, donde la defensa de la masticación tradicional, el consumo y uso de la Hoja de Coca con fines culturales y medicinales, coparon todos esfuerzos con el fin de desestigmatizar esta práctica y visibilizar la importancia de la misma para los pueblos y naciones indígenas. Hoy, a diez años de la re-adhesión de Bolivia a la Convención Única de Estupefacientes que permitió el uso y consumo de la Hoja de Coca en el territorio boliviano, queda dilucidar los nuevos pasos, acciones y posibilidades de éxito que emprenderá la diplomacia boliviana para internacionalizar el uso y consumo de la misma ante el relanzamiento de la campaña comandada por el vicepresidente David Choquehuanca en un contexto internacional diferente al de los primeros años de la gestión del MAS-IPSP.