During the 1970s and 1980s, South American exiles and humani­tarian activists created, on an international and local scale, different spaces for mental health care for the victims of state repression deployed by the military dictatorships. This was explicitly the case in Chile. There, mental health workers built a conceptual and political scaffolding to reinscribe mental illnesses in the framework of the violence inflicted by State Terrorism. This research recovers the theoretical and clinical aspects developed at the international and local levels to attend Chilean exile returnees. It hypothesizes that the Chilean experience was a pioneer in the elaboration of psi knowledge about exile because it defined it as a political trauma and reinscribed it in the political and social framework of that regime, but that this knowledge was developed inside and outside the country and involved not only the exile but also the return. This research is based on primary and testimonial sources.Durante los años ´70 y ´80, los exiliados sudamericanos y activis­tas humanitarios crearon a escala internacional y local diferentes espacios de atención en salud mental para las víctimas de la represión estatal desplegada por las dictaduras militares. Este fue, específicamente, el caso de Chile. Allí, los trabajadores de la salud mental construyeron un andamiaje conceptual y político para reinscribir los padecimientos psíquicos en el marco de la violencia azotada por el Terrorismo de Estado. Esta investigación recupera los aspectos teóricos y clínicos desarrollados a escala internacional y local para atender a los exiliados-retornados chilenos. Su hipótesis es que la experiencia chilena fue pionera en la elaboración de un saber psi sobre el exilio porque lo definió como un trauma político y lo reinscribió en el marco político y social de ese régimen, pero que este conocimiento se gestó dentro y fuera del país e implicó no solo al exilio sino también al retorno. Esta investigación se apoya en fuentes primarias y testimoniales.