Desde hace un tiempo a esta parte, he venido encarando distintas investigaciones concentradas en el accionar del cabildo hispano-colonial, centrándome principalmente en las políticas económicas dispuestas sobre las principales actividades y sus mercados, según el contexto geográfico y temporal que hayan sido considerados, siempre partiendo de la base de que se trató de una institución con múltiples atribuciones, y de que sus intervenciones influyeron no solamente sobre la economía, sino también sobre los intereses de los distintos sectores y actores sociales vinculados a la misma y sus variantes.