The Child Sexual Abuse (CSA) leaves profound psychological consequences, its prevalence reaches almost 30% worldwide. In Chile, infants between 8 and 13 years spend 1.100 effective hours in the classroom, being the school fundamental for protection, prevention and detection of CSA. Objective: Establish the perception about CSA in personnel of municipal schools in Antofagasta district. Method: Quantitative; among the applied instruments, a questionnaire from Márquez, M. et al., 2016; presented an amount of 703 workers from 20 schools. Results: the majority have a basic knowledge, although 67,8% don't receive training; 70% said they knew a victim of CSA, but of these 77,2% had not made any denounce; 71,4% mistakenly believe that the aggressor has obvious pathological characteristics. The School Prevention of Integration program, among workers who directly care for infants, only 25% knows CSA assessment methods, only 55,3% recognize the possibility of abuse in an infant, 81% declare they know victims, but a scarce 22% have denounced. The results show the probable invisibility of the phenomenon, increasing the risk for infants, including the most vulnerable, and therefore the need for urgent interventions.      El Abuso Sexual Infantil (ASI) deja consecuencias psicológicas profundas, su prevalencia llega casi al 30% a nivel mundial. En Chile los infantes entre 8 y 13 años pasan 1.100 horas efectivas en aula, siendo la escuela fundamental para la protección, prevención y detección del ASI. Objetivo: Establecer la percepción sobre ASI de funcionarios de escuelas municipales en la comuna de Antofagasta. Método: Cuantitativo; entre los instrumentos aplicados se utilizó cuestionario de Márquez, M. et al., 2016; contó con 703 trabajadores de 20 escuelas. Resultados: la mayoría posee un conocimiento teórico básico, aunque un 67,8% no recibe capacitaciones; un 70% señaló conocer a una víctima de ASI, pero de estos el 77,2% no ha realizado denuncias; un 71,4% creen erróneamente que el agresor tiene características patológicas evidentes. El equipo del Programa de Integración Escolar, de entre los profesionales que atienden directamente infantes, apenas un 25% conoce métodos de evaluación de ASI, sólo el 55,3% reconoce la posibilidad de abuso en un infante, un 81% declara conocer víctimas, pero un escaso 22% ha denunciado. Estos resultados muestran la probable invisibilización del fenómeno, aumentando el riesgo para los infantes, entre ellos a los más vulnerables, y por tanto la necesidad de intervenciones urgentes.