Some of the ways in which the feminist movement emerged in the social outbreak in Chile are analyzed, focusing on the non-institutional politicization of the movement and the use of the body and emotions to perform the protest; aspects present in a recent genealogy of feminism, considering two milestones: the feminist university shots of 2018 and the March 8, 2019 manifestation. A documentary analysis of a corpus of press releases on the three events and requests for the shots was made. We propose that feminism can be understood as a thread of continuity that makes intelligible this series of processes that, otherwise, could not be interpreted: new political formations and subjectivities that emerge from the overflow of institutionalism.Se analizan algunas de las formas en que emergió el movimiento feminista en el estallido social en Chile, centrándose en el proceso de politización no institucional del movimiento y el recurso al cuerpo y las emociones para performar la protesta; aspectos presentes en una genealogía reciente del feminismo, considerando dos hitos: las tomas universitarias feministas de 2018 y la manifestación del 8M de 2019. Se realizó análisis documental de un corpus de notas de prensa sobre los tres acontecimientos y petitorios de las tomas. Proponemos que el feminismo puede ser entendido como un hilo de continuidad que hace inteligible esta serie de procesos que, de otra manera, no podrían ser interpretados: nuevas formaciones y subjetividades políticas, que emergen del desborde de la institucionalidad.