This article aims to delve into the political function of the dystopian narrative, understood as a type of political image. Following of Gordin, Tilley & Prakash´s (2010) intuition, that dystopias are utopias that have gone wrong, it suggests that the dystopian narrative seeks to build an undesirable political image that permits the breaking away from the capture of desire produced by the pursuit of a certain utopia-illusion. We propose, as a key to the reading of dystopian narratives, that their emergence and proliferation stems from the historical experiences that account for the failure of the emancipatory impetus of modernity and its drift into social and political systems that perfect domination. Specifically, in the terms of Wallerstein (1995), the process by which the modernity of technology is historically imposed on the modernity of liberation. Este artículo se propone ahondar en la función política del relato distópico, entendido como un tipo de imagen política. Siguiendo la intuición de Gordin, Tilley & Prakash (2010) de que las distopías son utopías que han errado su curso, se plantea que el relato distópico busca construir una imagen política indeseable que permita romper la captura del deseo que ha producido la persecución de una determinada ilusión-utopía. Se propone, como clave de lectura de las narrativas distópicas, que su emergencia y proliferación se produce a partir de las experiencias históricas que dan cuenta del fracaso del ímpetu emancipador de la modernidad y su deriva en sistemas sociales y políticos que perfeccionan la dominación. En particular en los términos de Wallerstein (1995), el proceso mediante el cual la modernidad de la tecnología se impone históricamente a la modernidad de la liberación.