Recordar a Tomás Lago a los 50 años del Golpe, implica comprender su obra al interior de la Universidad de Chile y su impacto a nivel nacional e internacional. Fue el precursor de la conformación de un campo de conocimiento para el Arte Popular entre los años 30 y 70, desarrollo que se vio interrumpido a partir de la reforma educacional de 1968 y el Golpe cívico-militar de 1973. El presente texto propone un campo reflexivo de un ámbito del arte escasamente abordado por los contenidos académicos y educativos en las últimas décadas en Chile. Revisa las propuestas que consideran prioritario el estudio del Arte Popular en la educación pública, visibilizando la relación que establecen los/as artistas populares con el territorio donde ejecutan sus obras. De este modo, se indagan las condiciones de posibilidad que permitieron la emergencia de las zonas operativas a través de las cuales Lago concibió el Arte Popular, como también aquellas que facilitaron su corte epistemológico como área de estudio.