In this article I examine the poetry book Teoría del polen (2021), by Victoria Ramírez, under the consideration that its aesthetic proposal discursively dislocates the hegemonic ways of thinking nature, understood from the anthropocentric tradition as a passive and primitive entity. From Jane Bennett’s perspective in Vibrant Matter (2010), I argue that Ramírez’s text develops a vegetal poetics of the affective; that is, a way of positioning plants as acting and vibrant beings, capable of cohabiting horizontally with human beings. This poetics, which I call ‘compost writing’ (Haraway 2019), configures an alternative imaginary of plants, understood under this gaze as active and subjectivized, violent and organized entities, which challenges the binary and hierarchical relations of community (Esposito 2009) between humanity-nature.En el presente artículo examino el poemario Teoría del polen (2021), de Victoria Ramírez, bajo la consideración de que su propuesta estética disloca discursivamente los modos hegemónicos de pensar la naturaleza, entendida desde la tradición antropocéntrica como un ente pasivo y primitivo. A partir de la perspectiva de Jane Bennett en Vibrant Matter (2010), sostengo que el texto de Ramírez desarrolla una poética vegetal de lo afectivo; es decir, una manera de posicionar a las plantas como seres actantes y vibrantes, capaces de cohabitar de forma horizontal con los entes humanos. Esta poética, que denomino ‘escritura del compost’ (Haraway 2019), configura un imaginario alternativo de las plantas, entendidas bajo esta mirada en cuanto entes activos y subjetivados, violentos y organizados, lo que desafía las relaciones binarias y jerarquizadas de comunidad (Esposito 2009) entre humanidad-naturaleza.