Cultural Americanism at the end of the 19th century: Spain, America and the circulation routes of the Spanish and American book
“Americanismo cultural" a fines del siglo XIX: España, América y las rutas de circulación del libro español y americano
Author
Pasquaré, Andrea
Full text
https://meridional.uchile.cl/index.php/MRD/article/view/7438410.5354/0719-4862.2024.74384
Abstract
To commemorate the four hundred years of the Discovery of America, the Hispanic-American Literary Congress was held in Madrid, organized by the Association of Spanish Writers and Artists, with the purpose of building bridges of union and exchange of Hispanic and American cultural products, allocating the marketing of Spanish books in Spanish America plays a central role.
The increasing presence of publications in Spanish from other European publishers, coming mainly from France, and secondly, from England and Germany, made them aware of the necessary and urgent presence of Spain in controlling the American market. To the demand of individuals (businessmen and merchants, writers, political class) gathered in Americanist associations that demanded cultural policies that encompass the circulation and exchange of Spanish books in America, was added that of the historian and jurist Rafael Altamira who sought to integrate through its Americanist propaganda work, those editorial exchanges with a cultural policy of joint action that would facilitate dialogue and the definition of common programs between Spain and Spanish America. Al conmemorarse los cuatrocientos años del Descubrimiento de América se celebró en Madrid, el Congreso Literario Hispano-Americano organizado por la Asociación de Escritores y Artistas Españoles, con el propósito de tender puentes de unión e intercambio de los productos culturales hispanos y americanos, destinando a la comercialización del libro español en la “América española” un papel central.
La presencia cada vez mayor de publicaciones en castellano de otras editoriales europeas, procedentes principalmente de Francia, y en segundo lugar, de Inglaterra y Alemania les hacía advertir la necesaria y urgente presencia de España en el control del mercado americano. A la demanda de particulares (empresarios y comerciantes, escritores, clase política) reunidos en asociaciones americanistas que demandaban políticas culturales que abarcaran la circulación e intercambio del libro español en América, se sumaría la del historiador y jurista Rafael Altamira que buscó integrar a través de su labor de propaganda americanista, esos intercambios editoriales con una política cultural de acción conjunta que facilitara el diálogo y la definición de programas comunes entre España y “América Española”.