Una de las cuestiones más acuciantes y urgentes de nuestra era globalizada e industrializada la constituye el progresivo deterioro del medio ambiente, el cual, según los análisis más conservadores, no resistiría cien años más a este ritmo de contaminación, sobreexplotación y depredación generada por la mano del hombre. Y como este problema no es una mera dificultad económica o política que deba discutirse únicamente en foros internacionales o reuniones cumbres como las del G-20, pensamos que la filosofía está llamada a aportar una reflexión seria al tema de nuestro comportamiento frente a la naturaleza, la cual, en la medida de lo posible, podría lograr cambiar el paradigma de destrucción sistemática vigente hasta hoy si atendiéramos a ella. Para estos efectos, el punto de partida de nuestra reflexión es el pensamiento político-ecológico que el filósofo alemán Otfried Hoffe ha desarrollado en dos de sus más conocidas obras traducidas al español, a saber, El Proyecto Político de la Modernidad (2008) y Ciudadano económico, ciudadano del Estado, ciudadano del mundo. Ética política en la era de la Globalización (2007).  Desde esta perspectiva, entonces, intentaremos dilucidar cuál debe ser el puesto del hombre en el mundo natural, su relación con el mismo y, finalmente, determinar su responsabilidad frente al señorío sobre la naturaleza  que le ha sido dado.