«Dejémoslo ser un dios, si quiere»
Author
Robertson, Erwin
Abstract
La sentencia que encabeza este trabajo pertenece al por lo demás desconocido Damis de Esparta, quien, presumiblemente ante la petición de honores divinos que Alejandro dirigió a las ciudades griegas en el último año de su vida, opinó en esa forma (más exactamente: “Dejemos que Alejandro, si quiere, sea llamado dios”). Análogamente, Demóstenes habría dicho en Atenas, en la misma ocasión: “Que sea hijo de Zeus o, si quiere, de Poseidón”(Hypérides, Contra Demóstenes, fr. 7).