En 2020, Chile llevó a cabo un plebiscito histórico que decidió por amplio margen comenzar un proceso constituyente. La votación ocurrió en un contexto tumultuoso, marcado por el estallido social de 2019 y la pandemia de COVID-19. Este artículo explica cómo estas circunstancias estuvieron asociadas a la participación electoral, que experimentó una leve alza respecto a elecciones anteriores. Regresiones a nivel municipal de las 345 comunas de Chile sugieren que diferentes impactos de la pandemia se asociaron tanto positiva como negativamente con la participación. Adicionalmente, la exposición a protestas violentas y no violentas deprimió la participación electoral, particularmente en comunas más de derecha.In 2020, Chile held a historic plebiscite that decided, by a broad margin, to hold a constitution-making process. The vote took place in a tumultuous context, marked by the 2019 social outburst and the COVID-19 pandemic. This article explains how these circumstances were associated with turnout, which increased slightly compared to previous elections. District-level regression analyses of Chile’s 345 municipalities suggest that different impacts of the pandemic were both positively and negatively associated with turnout. Additionally, exposure to both nonviolent and violent protests during the social outburst depressed turnout, particularly in more right-wing districts.