El Instituto de Ingenieros de Chile fue una organización gremial que defendió los intereses de los profesionales de la ingeniería a través de su revista Anales del Instituto de Ingenieros de Chile, la cual le permitió exponer sus ideas y opiniones ante la esfera pública. Una de las preocupaciones que tuvo esta institución fue la formación de sus futuros colegas en la Escuela de Ingeniería de la Universidad de Chile, publicando diversos artículos sobre esta temática en su revista institucional. Una de estas instancias fue la reforma al plan de estudios entre los años 1917 a 1922, en el que los miembros del Instituto de Ingenieros abogaron por una orientación ligada a la industria y los procesos productivos. Para lo cual, promovieron la física como uno de los saberes que le entregaría a los estudiantes de ingeniería las habilidades básicas para que pudieran desempeñarse laboralmente en el sector fabril, debido a que esta ciencia permitía aplicar lo teórica a la práctica mediante los trabajos en laboratorio.