The complex processes of integration cannot be understood without considering a frame of reference and its immediate historical background. In this context, a look at the link between populism and foreign policy is presented, illustrated through the role of Venezuela in Latin American regionalism. Given the transformations brought about by the arrival of Chávez to power, the discursive aspects and the figure of the leader are highlighted, in line with the Bolivarian message and the construction of 21st century Socialism. These particularities, together with the resources provided by the oil boom of the first decade of 21st century, will promote a geopolitical reconfiguration of the region characterized by a counter-hegemonic project, which is why it is important to inquire about how the foreign policy populism of Venezuela has influenced integration in the region. That is why the paper reflect on how Bolivarian populism exports its discourse towards a regional multilateralism, which will substantially lose its vigor as Venezuela’s oil revenues dwindle.Los complejos procesos de integración no pueden ser comprendidos sin tener en cuenta un marco referencial y sus antecedentes históricos inmediatos. En este contexto, se presenta aquí una mirada sobre el nexo entre populismo y política exterior, ilustrado a través de un recorrido por el rol de Venezuela en el regionalismo latinoamericano. Dadas las transformaciones suscitadas por la llegada de Chávez al poder, se destacan los aspectos discursivos y la figura del líder, en consonancia con el mensaje bolivariano y la construcción del socialismo del siglo XXI. Estas particularidades, junto con los recursos aportados por la bonanza petrolera de la primera década del siglo XXI, promoverán una reconfiguración geopolítica de la  región caracterizada por un proyecto contrahegemónico, por lo que resulta importante indagar acerca de cómo el populismo de la política exterior venezolana ha incidido sobre la integración en la región. Por ello, la lectura propende a la reflexión acerca de cómo el populismo bolivariano exporta su discurso hacia un multilateralismo regional, el que perderá sustancialmente su vigor en la medida en que los ingresos petroleros de Venezuela vayan menguando