Las modificaciones culturales que conllevan el fenómeno de la llamada posmodernidad o crisis de la modernidad han afectado numerosas esferas sociales. Los desafíos a la educación no han sido menores. Dentro de estos,se considera la revolución que implica el responder a la demanda social de educar para un mundo donde el volumen y la velocidad de transformación del conocimiento, punta de partida para las metas de desarrollo de habilidades cognitivas como el 'aprender a conocer' que propugnan las diversas estrate­gias de reforma educativa en el mundo. Las modificaciones del sistema educacional no tan solo han afectado los elementos del currículo explicito de la escuela, sino que han influido en la red comunicacional al interior del aula. El nuevo concepto de aprendizaje exige una modificación en términos de las definiciones de roles dentro de la relación profesor - alumno; puesto que implica, tal como lo postula Paulo Freire, devolver la voz a quienes tradicionalmente -desde el modelo racionalista académico- no han poseido la actividad en el proceso de enseñanza apren­dizaje