There is no need to point out that we are now in difficult and dangerous times. For many years we were living in a world that, despite its problems, has been nevertheless engaged in a democratization process whereby human rights, fundamental freedoms and opportunities for personal development were increasing. Today, this whole picture has changed. Attacks on democracy are active in several countries, including the ones where democracy seemed to be unshakable. In these new times, the design community (practitioners, researchers, theorists, students, journalists, publishers and curators who are professionally involved in designrelated activities) should stand up, speak out and act.De más está afirmar que hoy vivimos tiempos difíciles y peligrosos. Durante muchos años estuvimos viviendo en un mundo que, a pesar de sus problemas, estaba sin embargo comprometido con un proceso de democratización mediante el cual los derechos humanos, las libertades individuales y las oportunidades para el desarrollo personal crecían. Hoy, esta imagen ha cambiado. Los ataques a la democracia se encuentran activos en varios países, incluidos aquellos donde esta parecía inamovible. En estos nuevos tiempos, la comunidad del diseño (profesionales, investigadores, teóricos, estudiantes, periodistas, editores y curadores involucrados profesionalmente en actividades relativas al diseño) debiera ponerse de pie, alzar la voz y actuar.