Habiendo detectado ciertas carencias en la evaluación de los aprendizajes en el PIDEMSG, se ha diseñado un protocolo de evaluación formativa, empleando fichas de observación y feedback continuos. Un estudio piloto ha comprobado la validez del protocolo mediante su aplicación con nueve monitores de Educación Infantil, Primaria y Secundaria, y un observador externo. Los instrumentos resultantes son útiles y convenientes para mejorar el aprendizaje de los escolares y ayudar a mejorar la práctica docente de los monitores. Asimismo, ha quedado patente su utilidad para complementar la retroalimentación positiva y continua habitual en la iniciación deportiva basada en modelos comprensivos.