The issue of skills in recent years has gained enormous importance, for the increasing demand of highly competent and specialized professionals.The concept of competencies, thus understood, is an attempt to deepen the educational task of developing skills in individuáis to tackle the challenges of living, independent of the material conditions.  However, this concept is limited if restricted to the development of individual capabilities, obviating the collective construction of meaning, the development of joint action or building bridges of trust within society. The concept of competencies is greatly reduced if is not altogether, in its formulation, of a profound reflection on the role of education in the current social orden. Currently, we do not have a profile for teachers who work in establishments of vulnerability that needs well-trained teachers with high expectations for student success and high self-esteem of these.Therefore, it presents a challenge for teachers, so they can tum around from his academic training, to one based on the needs of society, and move from a focus on education to one focused on leaming students.From questions asked to different social and educational, we can discem that has been given greater emphasis on specific skills related to the professional areas (disciplinary and teaching), rather than arcas of social and community projection of the profession. The challenge is to check the curriculum policies to meet the social and cultural diversity of Latin America, including special needs of groups and ethnic minorities.El tema de las competencias en los últimos años ha adquirido enorme importancia, por las demandas exigentes de profesionales altamente competentes y especializados.El concepto de competencias así entendido, es un intento de profundizar en la tarea pedagógica de desarrollo de capacidades en los sujetos para hacer frente a los desafíos de su vida independiente de las condiciones materiales de vida. Sin embargo, tal concepción resulta limitada al restringirse al desarrollo de capacidades individuales, obviando la construcción colectiva de sentidos, el desarrollo de la acción común o la construcción de lazos de confianza al interior de la sociedad. El concepto de competencias se reduce significativamente si no va acompañado, en su formulación, de una profunda reflexión sobre el papel de la educación en el orden social actual.Hoy en la actualidad, no se cuenta con un perfil para los profesores que se desempeñan en los establecimientos de vulnerabilidad, que necesita a profesores bien preparados, con altas expectativas de éxito de sus alumnos (as) y con una elevada autoestima de estos.Por tal motivo, se plantea como un desafío para los docentes, para que ellos puedan dar un giro desde su Formación académica, hacia una basada en las necesidades de la sociedad, y avanzar de un enfoque centrado en la enseñanza a uno centrado en el aprendizaje de los estudiantes.De las consultas realizadas a diferentes actores sociales y educativos, se desprende que se le ha dado mayor importancia a las competencias específicas vinculadas a las áreas profesionales (disciplinaria y didáctica) que a las de proyección social y comunitaria de la profesión. El desafío es revisar las políticas curriculares para atender la diversidad social y cultural latinoamericana, incluyendo a grupos con necesidades especiales y minorías étnicas.